RESEÑA
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https://dx.doi.org/10.33776/amc. v49i180.7731
Análisis y Modicación de Conducta, 2023, vol. 49, nº 180
Ante el nacimiento de un hijo, los padres y
el entorno cercano crean una serie de expec-
tativas e ideas de cómo podrá ese niño, ade-
más de preguntas como: “¿Tendrá mis ojos?
¿Qué será de mayor? ¿A quién se parecerá?”
Sin embargo, la pregunta más relevante es y
será “¿Estará sano?” Es lo que más se desea.
Cuando los padres son informados o descu-
bren ellos mismos que su hijo presenta di-
cultades o riesgo de padecerlas, es cuando se
rompen todos los esquemas preconcebidos y
entran en una especie de duelo, donde tienen
que formar una visión más realista acorde a
las características del hijo. Los padres expe-
rimentan muchas emociones y sentimientos
que muchas veces no saben gestionar y son
fuente de estrés y malestar psicológico. Los
profesionales de la Atención Temprana deben
saber identicar y comprender estas reaccio-
nes para poder ayudar y acompañar en el pro-
ceso. A la par se produce una readaptación
a distintos niveles (tiempo libre, economía
familiar, aciones, sueño, etc.). Una correcta
aproximación de las dicultades del hijo a los
padres, implicarles en todas las decisiones, así
como considerarles aliados en el proceso, son
indicadores que pueden favorecer el pronós-
tico y la alianza terapéutica.
Los autores hacen hincapié en la necesi-
dad de que la Atención Temprana no puede
ni debe reducirse a modelos médicos donde
sólo importa la opinión del médico a cargo,
ignorando los deseos y peticiones de la fa-
milia. Esta debe dar respuesta a las necesida-
des transitorias y permanentes del menor en
edad de 0 a 6 años, familia y entorno. Buscan-
do en la medida de lo posible prevenir y evi-
tar el desarrollo de un trastorno o alteración,
huyendo del modelo asistencial. Los autores
hacen hincapié repetidas veces en la impor-
tancia de no poner el foco en los aspectos
negativos y en lo que el niño no es capaz de
hacer, sino partir de la base de las fortalezas
que presente, lo que sí sabe hacer y es bueno
en ello, ya que, cambiar el foco puede cam-
biar la concepción de la dificultad.
De igual manera, en Atención Temprana no
hay que olvidar la perspectiva biopsicosocial
en la que nos encontramos, donde en la eva-
luación e intervención entran áreas de cogni-
ción, emoción, habilidades sociales, lenguaje,
habilidad motora y conducta. En este libro se
sigue un recorrido evolutivo en todas estas
áreas del recién nacido hasta los seis años con
todos sus hitos, así como del desarrollo del Sis-
tema Nervioso (Central y Periférico) y posibles
problemas que puede sufrir. Además, se expli-
ca cómo es y cómo debe ser la evaluación e in-
tervención en los principales diagnósticos que
pueden aparecer en la infancia y son fuente de
estrés para el niño y el entorno, esto es: Trastor-
no del Espectro Autista (TEA), Discapacidad In-
telectual (DI), discapacidad sensorial, Parálisis
Cerebral Infantil (PCI) y Trastorno por Décit de
Atención con Hiperactividad (TDAH).
Son objeto de Atención Temprana todos
los niños que en periodo pre, peri o postna-
tal han atravesado situaciones que podrían
alterar su desarrollo, también se incluyen los
niños de riesgo psicosocial, que son quienes
viven en condiciones poco estimulantes y
dañinas. Por su parte, la prematuridad ocu-
pa mucha importancia debido a su aumen-
to en países desarrollados, factores como