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Revista Onoba
2024, Nº 12, 3-15
ISSN: 2340-3047
https://doi.org/10.33776/onoba.vi12.8315
IntervencIón arqueológIca en la vIlla romana
de gárgoles de arrIba (cIfuentes, guadalajara)
Archaeological Work in the Roman Villa of
Gargoles de Arriba (Cifuentes, Guadalajara)
resumen
Este artículo es el resultado de la intervención
arqueológica llevada a cabo durante año y medio
en los restos arqueológicos de la villa romana del
municipio pedáneo de Gárgoles de Arriba (Cifuentes,
Guadalajara). Estos trabajos formaron parte de
un proyecto más amplio, que tuvo como objetivo
la intervención arqueológica y de restauración en
varios Bienes del Patrimonio Cultural del término
municipal de Cifuentes (Guadalajara), bajo el
amparo de su Ayuntamiento: el castillo y parte de
las murallas del albacar, lo que vino a denominarse
como Entorno 1 - Forticaciones Medievales; y la
villa romana del municipio pedáneo de Gárgoles de
Arriba, lo que se designó como Entorno 2 - Villa
Romana.
Este artículo se centra en los trabajos desarrollados
en el Entorno 2 - Villa Romana. Éstos consistieron
en el acondicionamiento de los restos arqueológicos
ya conocidos, en la excavación arqueológica de un
sondeo estratigráco, en la valoración del estado de
conservación de las estructuras, y, por último, en la
instalación de un panel informativo con los datos
más relevantes del yacimiento. Estos cometidos
se desarrollaron con una metodología sistemática
y minuciosa, que dieron como resultado una
provechosa información arqueológica que suma,
si cabe, a los datos ya obtenidos de las anteriores
investigaciones.
abstract
This report is the result of the archaeological
intervention carried out for a year and a half
in the archaeological remains in the Roman
villa in the municipality of Gargoles de Arriba
(Cifuentes, Guadalajara). These works were part of
a broader project, which aimed at archaeological
and restoration intervention in several Cultural
Heritage Items in the municipality of Cifuentes
(Guadalajara), with the City Council as developer:
the fortress and part of the walls of the castle
fold of the village, what came to be called Site 1:
Medieval Fortications; and the Roman villa in
the municipality of Gargoles de Arriba, which was
designated as Site 2: Roman Villa.
This report focuses on the work carried out in Site
2: Roman Villa. These consisted of reconditioning
of already known archaeological remains, the
archaeological excavation of a stratigraphic survey,
an assessment of the state of conservation of the
structures, and a information panel was placed
with the most relevant information on the site.
These works were developed with a systematic
methodology, which resulted a useful archaeological
information that adds, further, to the data already
obtained from previous investigations.
Israel jacobo alcón garcía
Universidad Complutense de Madrid
Palabras clave
Arqueología; Villa romana; Romanización;
Cifuentes; Gárgoles de Arriba.
Key words
Archaeology; Roman villa; Romanization;
Cifuentes; Gárgoles de Arriba.
Recibido: 19/03/2024
Revisado: 28/05/2024 Aceptado: 30/05/2024
Publicado: 22/11/2024
ijalcon@yahoo.es
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1. IntroduccIón
A lo largo de año y medio, desde el 3 de abril de
2017 hasta el 28 de septiembre de 2018, se llevó a
cabo una intervención arqueológica y de restaura-
ción en varios Bienes del Patrimonio Cultural del
término municipal de Cifuentes (Guadalajara), bajo
el amparo de su Ayuntamiento: el castillo y parte
de las murallas del albacar, lo que vino a denomi-
narse como Entorno 1 - Forticaciones Medievales;
y la villa romana del municipio pedáneo de Gárgo-
les de Arriba, lo que se designó como Entorno 2 -
Villa Romana (Alcón et alii, 2018). El Castillo y las
Murallas de Cifuentes están incluidos en el Inven-
tario del Patrimonio Cultural de Castilla-La Man-
cha con los números de referencia 07190860031
y 07190860048, respectivamente; asimismo, son
Bien de Interés Cultural (BIC), declarados de for-
ma genérica en la Disposición Adicional Segunda
de la Ley 16/1985, de 25 de junio, del Patrimonio
Histórico Español. La Villa Romana de Gárgoles de
Arriba está incluida en el Inventario del Patrimonio
Cultural de Castilla-La Mancha con el número de
referencia 07190860050.
Este proyecto estuvo desarrollado a partir de un
programa mixto de empleo y formación, subven-
cionado por la Junta de Comunidades de Castilla-
La Mancha en el marco de ejecución de actuacio-
nes conanciadas con el Fondo Social Europeo, y
enmarcadas en el tramo autonómico del Programa
Operativo de Empleo Juvenil (DOCM, 2016). El
proyecto contó con una inversión de 424.022,25
euros, y persiguió la realización de labores de pre-
servación y rehabilitación de determinadas zonas
del castillo de Cifuentes y de su albacar, además de
la villa romana del municipio pedáneo de Gárgoles
de Arriba, con el objetivo de hacerlas visitables y
ofrecer paquetes turísticos atractivos para los visi-
tantes. Fundamentalmente, fue un programa ins-
pirado en hacer partícipes a los jóvenes, con una
franja de edad entre los 17 y 29 años, en un proceso
de I + D + i sobre el Patrimonio Cultural de la loca-
lidad alcarreña.
Este artículo se centra en los resultados conse-
guidos en el Entorno 2 - Villa Romana. Los trabajos
desarrollados consistieron en el acondicionamiento
de los restos arqueológicos exhumados desde na-
les del siglo XIX hasta la última intervención en
el año 2000; igualmente, se realizó una excavación
arqueológica de tipo puntual mediante un sondeo
estratigráco; también, se llea cabo una valora-
ción del estado de conservación de las estructuras;
y, por último, se instaló un cartel informativo sobre
la importancia del yacimiento. En todo momento,
estas labores se desarrollaron con una metodología
sistemática y minuciosa, que dieron como resulta-
do una valiosa información arqueológica que suma,
si cabe, a los datos ya obtenidos de las anteriores
investigaciones.
2. localIzacIón
El yacimiento arqueológico se localiza en el
municipio pedáneo de Gárgoles de Arriba, pertene-
ciente al término municipal de Cifuentes (Guada-
lajara). La villa romana está situada a media ladera
de una fértil vega, sobre un pequeño aoramiento
rocoso calizo, quedando emplazada sobre una leve
plataforma desde la cual se obtiene un magníco
control visual del entorno circundante. La villa ro-
mana está rodeada por terrenos de laboreo agrícola,
que en la actualidad alterna los campos de cereal
con olivares (gura 1).
Se puede acceder a los restos arqueológicos a
partir de la carretera N-320, desde la población de
Cifuentes en dirección a Sacedón, o desde la pobla-
ción de Gárgoles de Arriba en dirección a Cifuen-
tes. Desde Cifuentes, a unos 3 km en dirección a
Sacedón, antes de llegar al desvío de la población
de Gárgoles de Arriba, justo en una curva que gira
a la derecha, parte un camino de tierra en el lateral
izquierdo en dirección NE. Desde este camino, se
deja atrás la ermita de San Blas, y, en la siguiente
bifurcación, se toma el camino de la derecha; por el
que se avanzan escasos 150 m hasta llegar a la puerta
de acceso del vallado metálico que protege el yaci-
miento arqueológico.
Figura 1. Ortofotografía de los restos arqueológicos de la
villa romana (parcela 37 del polígono 506) y su ubica-
ción en el mapa geográco de España (s.f.).
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3. marco hIstórIco de la vIlla romana
La villa romana de Gárgoles de Arriba (Cifuen-
tes, Guadalajara) está situada a los pies del cerro de
la ermita de San Blas. Forma parte de un conjunto
de enclaves de época romana, estratégicamente si-
tuados en la primera llanura que abre el río Tajo tras
abandonar el curso alto de su nacimiento, y a una
altitud sobre el nivel del mar que oscila entre los
600 y 1.000 m (Sánchez-Lafuente, 1986, 180; 1995,
311). Según Abascal (1981, 416; 1982), Sánchez-
Lafuente (1986, 180) y Gamo (2017, 43), la villa se
sitúa junto a la vía romana que va desde Segontia,
la actual Sigüenza (Guadalajara), hasta Segobriga,
la actual Saelices (Cuenca), pasando por Ercavica
(Cañaveruelas, Cuenca).
La vía Segontia-Ercavica-Segobriga no apa-
rece descrita en el Itinerario de Antonino o en el
Anónimo de Rávena; sin embargo, Abascal (1981;
1982) es uno de los primeros autores que, a partir
del estudio de los restos arqueológicos existentes y
de los miliarios documentados hasta el momento,
hizo una propuesta de reconstrucción del trazado a
lo largo de las provincias de Guadalajara y Cuenca.
No existen datos rigurosos sobre el momento de su
construcción, aunque es posible que su origen fuera
bastante antiguo (Gamo, 2017, 43). Almagro (1976-
1978, 101) propone un origen prerromano, mientras
que Abascal (1982), Palomero (1987, 216) y Fuentes
(2006, 78-79) respaldan su existencia desde época
republicana.
Todo el recorrido de la antigua vía romana, des-
de la localidad de Cifuentes hasta el municipio de
Trillo, ambos en la provincia de Guadalajara, recibe
el nombre de Camino Viejo de Cifuentes a Trillo.
Según Abascal (1981, 423), es posible que este ca-
mino fuera utilizado en época medieval, o, incluso,
en momentos posteriores, aprovechando la estruc-
tura que quedaba de época romana. Sin embargo,
desde el siglo XIX apenas ha sido utilizado, ya que
en algunos tramos estaba roturado, y, en otros, se
encontraba prácticamente oculto por la vegetación.
Tal y como se describe en el epígrafe siguien-
te, principalmente en las décadas de los años ´70 y
´80 del siglo XX se desarrollaron varias campañas
arqueológicas en la villa romana. En primer lugar,
por Dª. Carolina Nonell (1976; 1977) entre los años
1975 y 1977; y, posteriormente, por D. Dimas Fer-
nández-Galiano (1995; 2000) entre los años 1979
y 1985, y de forma puntual en el año 2000. Estos
trabajos de investigación pusieron al descubierto
un yacimiento arqueológico que se construyó en el
siglo I d. C. y que fue reformado en época bajoim-
perial (siglo IV d. C.), momento al que pertenecen la
mayor parte de las estructuras y pavimentos musi-
vos. A partir de estas intervenciones se documentó
parte de la zona residencial (pars urbana) de la vi-
lla, que está organizada en torno a un gran espacio
abierto de forma rectangular o patio y en la que
destacan un nutrido grupo de estancias (gura 2)
(García-Entero, 2011, 45).
Según Sánchez-Lafuente (1995, 311-312), “el ala
norte se articula con un gran pasillo de 30 m que
daba acceso a distintas estancias de las que destaca
un oecus en el centro. Pasillo y estancias estaban
recubiertas con mosaicos que han sido fechados en
la primera mitad del siglo V. En el lado noroeste
se descubrió parcialmente un grupo de habitaciones
integradas en un conjunto termal a las que se acce-
día desde un pasillo de más de 30 m de longitud (…)
De este sector de la villa interesa aquí resaltar dos
habitaciones destinadas a frigidaria parcialmente
excavadas en 1982. Se trata de dos estancias de fun-
ción similar provistas de sendas piletas para baño y
unidas entre sí por una pequeña cámara de acceso
que hacía innecesario salir al pasillo contiguo; este
pasillo, que posiblemente estaba porticado, miraba
al hortus”. Fernández-Galiano (1995, 157) describe
una estancia de planta en cruz, situada en el sector
NO del yacimiento, que interpretó como un mau-
soleo, realizado “en un momento indeterminado de
la vida del edicio, pero en momento previo a la
gran remodelación del siglo IV”.
En lo que respecta a la evolución y transforma-
ción o nal de la villa en el periodo tardoantiguo,
es muy posible que tuviera una pervivencia mayor
a la que tradicionalmente se ha considerado, siendo
usada y reutilizada hasta momentos muy avanza-
dos en el tiempo. Según Ripoll y Arce (2001, 27),
“la transformación de un sector de una villa o de
una domus urbana en un oratorio privado o en una
iglesia, es un fenómeno que se detecta con frecuen-
cia. En algunos cánones de los concilios de Hispa-
nia del siglo IV se hace referencia a la existencia de
lugares de culto en las mismas y en donde se cele-
bran actos religiosos diversos”. Precisar en qué mo-
mento se producen estas modicaciones y cuándo
naliza el hábitat en la villa sólo puede realizarse a
partir de un análisis especíco de los resultados de
la intervención arqueológica; sin embargo, se des-
prenden indicios generalizados que ofrecen varias
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hipótesis. Según Ripoll y Arce (2001, 37 y 38), es
posible que el cambio en el uso de las estructuras
residenciales ocurriera en los siglos V y VI, aun-
que en Hispania se ha constatado principalmente
entre los siglos III y IV, relacionado directamente
con la crisis agrícola, con las modicaciones en la
producción y elaboración de determinados produc-
tos, y, por tanto, con la disgregación de los grandes
circuitos comerciales. Es a partir del estudio de los
materiales arqueológicos y de la continuidad en las
importaciones cerámicas, que en la actualidad esta
teoría esté en proceso de revisión.
Ripoll y Arce (2001, 41 y 42) recalcan el factor
de la cristianización de los grandes propietarios y
la cada vez mayor fuerza de la Iglesia para com-
prender, en parte, el por qué de las transformacio-
nes de las villas, e, incluso, su desaparición como
sistema de explotación. Los dueños de estas villas
fueron donando progresivamente sus posesiones a
la Iglesia, en un acto de evergetismo, lo que produ-
jo una transformación del sistema de hábitat y un
engrandecimiento del patrimonio eclesiástico. Este
proceso de evergetismo provocó, por un lado, que la
aristocracia viera a la institución eclesiástica como
un rival; y, por otro, la conversión de algunas villas
en iglesias o en monasterios, con el n de establecer
un mayor control y como muestra de ascetismo.
En este sentido, cabe destacar el estudio de Ber-
mejo (2012), quien analiza la continuidad del asen-
tamiento humano en esta zona a partir del culto, en
este caso en concreto, de San Blas. Presumiblemen-
te los restos del santo se custodiaban en un templo
o ermita situado junto al cerro donde siglos después
se levantó el monasterio de monjas dominicas de
San Blas del Tovar. La fundación de este monaste-
rio está ligada directamente a la gura de don Juan
Manuel (1282-1348), quien adquir el señorío de
Cifuentes en 1317 y lo poseyó en régimen de con-
dominio con su hija doña Constanza hasta 1348.
Fue un año antes de su muerte, en 1347, cuando
fundó el mencionado monasterio, situado junto a
los restos de la villa romana. El lugar elegido por
don Juan Manuel para erigir el templo fue en el
mismo punto donde se veneraban las reliquias de
San Blas, en el paraje de El Tovar, entre las locali-
dades de Cifuentes y Gárgoles de Suso (o de Arri-
ba). Sin embargo, la suerte del monasterio cambió
radicalmente a principios del siglo XVII, cuando
el duque de Lerma (1553-1625) ordenó trasladar el
monasterio desde la localidad de Gárgoles de Arri-
ba (Cifuentes, Guadalajara) hasta la villa de Lerma
(Burgos), creando un nuevo monasterio con la ad-
vocación a San Blas. El traslado se hizo efectivo en-
tre 1613 y 1617, llevándose consigo las reliquias del
santo (Bermejo, 2012).
En la actualidad se distinguen las exiguas rui-
nas donde se erigía el monasterio, muy cerca de
la ermita de San Blas. Incluso se intuye, median-
te fotografía aérea, los restos de lo que pudo ser el
claustro y la iglesia. Respecto al material empleado
en la construcción del templo, Abascal (1984, 21)
piensa que es muy posible que la piedra de la villa
romana fuera utilizada en la construcción del mo-
nasterio, debido a su cercanía. Nonell (1976), que
estaba excavando en los restos arqueológicos de la
villa romana, aprovechó la ocasión para intervenir
puntualmente en los restos del monasterio. Ésta
documentó parte de las edicaciones conventuales,
además del cementerio, indicando que eran bastan-
te dignas y nobles, y de gran extensión.
4. hIstorIografía de las InvestIgacIones de la
vIlla romana
Los estudios arqueológicos en la villa romana
de Gárgoles de Arriba (Cifuentes, Guadalajara) se
iniciaron a nales del siglo XIX, cuando en 1893
el marqués de Laurencín encontró restos de tese-
las y un miliario en una viña de su propiedad (De
Uhagón, 1893). Sin embargo, no fue hasta las dé-
cadas de los años ´70 y ´80 del siglo XX, cuando
Figura 2. Ubicación del sondeo estratigráco en la villa
romana de Gárgoles de Arriba.
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se desarrollaron varias campañas arqueológicas de
forma sistemática en la villa romana. En primer
lugar, por Nonell (1976; 1977) entre los años 1975
y 1977; y, posteriormente, por Fernández-Galiano
(1995) entre los años 1979 y 1985. En 1979 y 1981
Abascal (1981) realizó dos cortes estratigrácos en
la vía Segontia-Segobriga, muy cerca de los res-
tos arqueológicos. Por último, Fernández-Galiano
(2000) repitió una campaña arqueológica en el año
2000. A continuación, se describen brevemente
cada una de las intervenciones arqueológicas.
4.1. D. Francisco Rafael de Uhagón
Guardamino (1893)
La primera referencia de los restos arqueológi-
cos de la villa romana de Gárgoles de Arriba (Ci-
fuentes, Guadalajara) está constatada por el enton-
ces propietario de la tierra, el aristócrata y académi-
co D. Francisco R. de Uhagón (2017, 38), marqués
de Laurencín, que hizo una reseña en el Boletín de
la Real Academia de la Historia ante el hallazgo de
unos restos arqueológicos en una nca de su pro-
piedad.
D. Francisco R. de Uhagón, en una de las visi-
tas a sus tierras, en donde tenía un viñedo, advirtió
la presencia de un gran número de teselas. Tras la
sospecha de la existencia de un mosaico romano,
interrogó al administrador de la nca sobre el ha-
llazgo o ausencia de restos similares. Éste armó
que “al roturar el terreno y meter el arado, se en-
contraron en varios sitios con un piso duro for-
mado de pequeñas piedrezuelas, y a poca distancia
de esto, una piedra de base cuadrada y cuidadosa-
mente labradas sus aristas, de forma cilíndrica, y de
una altura como de 2 m. En una de sus caras había
una larga inscripción en caracteres muy gastados
(...)”. A sabiendas de que esta piedra era un milia-
rio, Francisco R. de Uhagón armó cómo “después
de haber permanecido abandonado por espacio de
cinco años en la cerca de la viña, la mandó partir
en cuatro o cinco pedazos”. Éstos fueron aprove-
chados en los cimientos de la construcción de una
nueva bodega, que mandó labrar él mismo, posible-
mente en la misma localidad de Gárgoles de Arriba
(De Uhagón, 1893, 347 y 348).
Asimismo, D. Francisco R. de Uhagón (1893,
348) describe someramente cómo inició una serie
de trabajos de excavación sobre los restos arqueo-
lógicos, donde encontró, bajo un gran derrumbe
de tejas, los muros sólidos y anchos de una antigua
edicación, junto con un pavimento de mosaico:
“(...) los colores del mosaico son cuatro: blanco y
negro (dominantes), rojo y amarillo. De este últi-
mo sólo quedan restos, pues la piedra parece muy
arenosa y deleznable y se ve perfectamente el surco
que al desaparecer ha dejado en el dibujo. Estos mo-
saicos carecen de guras, adoptando formas geo-
tricas (...)”.
4.2. Dª. Carolina Nonell Masjuán (1975 -
1977)
El siguiente hito en los estudios arqueológicos
de la villa romana de Gárgoles de Arriba (Cifuen-
tes, Guadalajara) estuvo protagonizado por la his-
toriadora Dª. Carolina Nonell durante la década de
los años ´70 del siglo XX (Sánchez-Lafuente, 2017,
38). Inicialmente llevó a cabo una serie de prospec-
ciones superciales del terreno, en las que docu-
mentó abundantes teselas y fragmentos cerámicos
relacionados directamente con los restos arqueoló-
gicos. Estos incipientes hallazgos, le suscitaron el
suciente interés como para solicitar a la Dirección
General de Bellas Artes el permiso para iniciar nue-
vos trabajos de excavación arqueológica. Éstos die-
ron como resultado la exhumación de restos cons-
tructivos y el registro de varios mosaicos (Nonell,
1976; 1977).
Lamentablemente, Nonell falleció durante el
proceso de investigación de los restos arqueoló-
gicos exhumados, por lo que no pudo desarrollar
un análisis profundo y preciso sobre el yacimiento
arqueológico. Sin embargo, de la publicación reali-
zada en el Noticiario Arqueológico Hispánico (No-
nell, 1976), se pueden extraer varias apreciaciones
de gran interés:
1. Documentó un nivel de incendio, lo que le llevó
a pensar en un colapso violento de las estructu-
ras.
2. Registró una canalización de agua bajo las es-
tancias, lo que le hizo sospechar sobre la ubica-
ción de un impluvium, en contraposición a una
zona termal.
3. Los pavimentos musivarios exhumados fueron
fechados en el siglo IV d. C.
4. A partir de la exhumación de una gran cantidad
de materiales muebles, encuadró cronológica-
mente el yacimiento entre los siglos II y V d. C.
5. Documentó restos estructurales y materiales
muebles del periodo medieval.
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4.3. D. Juan Manuel Abascal Palazón (1979
y 1981)
Muy cerca de los restos arqueológicos de la villa
romana, Abascal (1981) realizó en 1979 y 1981 dos
cortes estratigrácos en la vía Segontia-Segobri-
ga, en una zona donde el camino histórico discurre
encajonado en una vaguada en forma de trapecio
invertido. Según describe Abascal (1981, 421), una
vez rebajado el nivel supercial de humus, apareció
en la parte central del corte un pequeño pavimento
de cantos rodados de mediano tamaño; bajo este ni-
vel, y, a ambos lados, documentó un nivel de grava
mezclada con arcilla, que estaba asentado directa-
mente sobre el estrato geológico (arcillas). Abascal
(1981, 421) interpretó el pavimento de cantos ro-
dados como un “parche que intentaba cubrir algún
desperfecto ocasionado por las lluvias”, ya que no
fue documentado en el resto del ancho de la calza-
da.4.4. D. Dimas Fernández-Galiano (1979 -
1985 y 2000)
El inesperado fallecimiento de Dª. Carolina No-
nell en 1980, conllevó que se hiciera cargo de la
continuidad de los trabajos de investigación el nue-
vo director del Museo Provincial de Guadalajara,
D. Dimas Fernández-Galiano (Sánchez-Lafuente,
2017, 38-39). Éste asumió la puesta en valor de los
espacios exhumados por Nonell, principalmente en
la zona del oecus; asimismo, recupey trasladó los
mosaicos al Museo Provincial de Guadalajara.
Durante los primeros años de intervención ar-
queológica, Fernández-Galiano (1995) tuvo como
objetivo primordial documentar el tamaño del pa-
tio interior, a partir del cual se organizaba el resto
de los espacios habitacionales. Con estos trabajos,
localizados en el sector SE del yacimiento arqueo-
lógico conocido hasta el momento, se exhumaron
varias estancias distribuidas a partir de un gran pe-
ristilo, pavimentadas con mosaicos en buen estado
de conservación (García-Entero, 2011, 45). Estas es-
tancias correspondían con una remodelación de la
villa llevada a cabo en la segunda mitad del siglo IV
d. C., y que aprovechaban estructuras encuadradas
cronológicamente en época altoimperial.
En el año 2000 Fernández-Galiano y Parcerisas
(2000) retomaron los trabajos de investigación ar-
queológica. En este caso en concreto, se realizaron
un total de 6 sondeos estratigrácos de morfología
cuadrangular de 3,00 m de lado, situados en el sec-
tor NO, además de un profundo trabajo de limpieza
y restauración de algunos mosaicos. Esta interven-
ción tuvo dos objetivos principales: por un lado,
detener la degradación de los restos arqueológicos,
y, por otro, evaluar la potencialidad del yacimiento.
5. análIsIs de la IntervencIón arqueológIca
El Programa Operativo de Empleo Juvenil de
Castilla-La Mancha comenzó en la localidad de Ci-
fuentes (Guadalajara) el día 3 de abril de 2017. Du-
rante los dos primeros meses del Programa, los tra-
bajos estuvieron enfocados única y exclusivamente
en la formación del alumnado, con el objetivo de
crear una base de conocimiento previo a las labores
de arqueología y de restauración, tratando de con-
cienciar en el menor tiempo posible sobre la labor
que iban a desempeñar a lo largo de los meses. Una
vez nalizado este periodo previo de aprendizaje y
asimilación de conocimientos, dio comienzo la fase
de trabajo en campo, en la que, de manera paulati-
na, se desarrollaron las labores que en los siguientes
párrafos se describen.
Los trabajos que se llevaron a cabo en la villa
romana de Gárgoles de Arriba (Cifuentes, Guada-
lajara) tuvieron cuatro objetivos principales: en
primer lugar, el acondicionamiento de los restos
arqueológicos ya conocidos; seguidamente, aportar
nuevos datos históricos y arqueológicos mediante la
excavación de un sondeo estratigráco; asimismo,
valorar el estado de conservación de las estructu-
ras ya conocidas; y, nalmente, instalar un cartel
informativo sobre la importancia del yacimiento.
Este proyecto, desarrollado con una metodología
sistemática y minuciosa, propició un trabajo cien-
tíco y de investigación prolíco. A continuación,
se describen brevemente estos trabajos.
5.1. Labores de acondicionamiento
Los trabajos de acondicionamiento de los restos
arqueológicos, de su entorno circundante, e, inclu-
so, del acceso a los mismos, fue el primer objetivo
de la intervención en la villa romana de Gárgoles de
Arriba (Cifuentes, Guadalajara).
El desbroce y la limpieza supercial de los restos
arqueológicos se realizaron con sumo cuidado, ya
que se encontraban en un estado de conservación
muy vulnerable. En ningún caso se arrancaron de
raíz las plantas, sino que se trató de efectuar el cor-
te a ras de suelo, evitando desprendimientos en los
mampuestos y pavimentos en los que estaban arrai-
gadas. Fue un trabajo manual lento y minucioso,
desarrollado con paciencia, utilizando, en todo mo-
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mento, herramientas de pequeño tamaño. Para ello,
se siguió un orden lógico de trabajo. Aprovechando
que el yacimiento arqueológico constaba de varias
estancias, se actuó una tras otra, hasta dejarlo libre
de vegetación herbácea y arbustiva (guras 3 y 4).
Una vez eliminada la vegetación de los restos
arqueológicos, el siguiente paso consistió en la ade-
cuación del camino de acceso al yacimiento desde
la carretera N-204. Éste presentaba algunas de-
ciencias en ciertos puntos de su recorrido. Desde el
punto más cercano a la carretera, el camino estaba
en buenas condiciones para el acceso de tráco ro-
dado; sin embargo, a medida que el camino tomaba
inclinación y el sustrato geológico calizo daba paso
al arcilloso, el camino presentaba barranqueras,
grietas y fuertes desniveles difíciles de sortear para
un vehículo no todoterreno. Se tomó la decisión de
arreglar el camino con el objetivo de hacer los res-
tos arqueológicos más accesibles, tanto para el equi-
po del Programa Operativo de Empleo Juvenil de
Castilla-La Mancha, como para los posibles turistas
y/o visitantes. Para ello, se contrataron los servi-
cios de un maquinista con máquina retroexcavado-
ra. Los trabajos consistieron en el acuchillado del
propio camino, de los laterales, de la cubrición de
grietas y cárcavas, además de la retirada de piedras.
El siguiente objetivo fue el vallado de la parcela
37 del polígono 506 mediante una valla metálica
de tipo cinegético, de un máximo de 2,00 m de al-
tura y una puerta de acceso abatible de doble hoja.
Si bien es cierto que se documentaron elementos
muebles, como fragmentos cerámicos, en parcelas
circundantes a la mencionada parcela, ésta alberga
el grueso de los restos arqueológicos. El objetivo del
vallado perimetral era la protección de la villa ro-
mana ante posibles incursiones furtivas.
El último de los propósitos, dentro de los tra-
bajos de acondicionamiento, fue la retirada de las
acumulaciones de tierra procedentes de las excava-
ciones arqueológicas desarrolladas a lo largo del siglo
XX. Éstas, situadas especialmente en los sectores N
y NO, junto a los restos arqueológicos, ocultaban
parcialmente el yacimiento y distorsionaban el am-
biente natural circundante. Estos trabajos, al igual
que en el caso de la adecuación del camino de acce-
so, se llevaron a cabo con una máquina retroexcava-
dora. Ésta consiguió extender las acumulaciones de
tierra hacia los sectores N y E, nivelando el terreno
y rellenando fuertes desniveles producto de las co-
rrentías de aguas pluviales.
5.2. Excavación mediante sondeo
estratigráfico
El sondeo arqueológico fue situado en el sector
SO del yacimiento, junto a los restos exhumados
de las anteriores campañas arqueológicas, concre-
tamente en la continuación del corredor O situa-
do junto al gran espacio abierto o patio de forma
rectangular del conjunto arquitectónico. La ubica-
ción de este sondeo estratigráco no fue realizada
al azar, sino que fue posicionado en este punto en
concreto para evitar la zona de laboreo agrícola me-
canizado. Al no haberse roturado con maquinaria,
cabía la posibilidad de que el nivel de arrasamiento
hubiera sido menor, y, por tanto, la conservación
de los restos arqueológicos ofreciese un mayor nú-
mero de datos.
A partir de este nuevo sondeo, con unas medidas
de 4,00 x 4,00 m de lado, se intentó vericar el esta-
do de conservación de los restos arqueológicos de la
Figura 3. Vista parcial de los restos arqueológicos hacia el
S, antes de los trabajos de desbroce.
Figura 4. Vista parcial de los restos arqueológicos hacia el
N, después de los trabajos de desbroce.
10 IntervencIón arqueológIca en la vIlla romana de gárgoles de arrIba (cIfuentes, guadalajara)
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villa romana, así como comprobar la proyección del
mencionado corredor hacia el sector SO, e, incluso,
documentar una estratigrafía dedigna y veraz. Se
trataba, en denitiva, de aportar y enriquecer una
mayor cantidad de datos a los ya conocidos con los
trabajos arqueológicos llevados a cabo durante todo
el siglo XX en este enclave del Patrimonio Cultural
tan emblemático del municipio pedáneo de Gár-
goles de Arriba (Cifuentes, Guadalajara). Una vez
nalizados los trabajos de excavación y documen-
tación arqueológica, los restos exhumados fueron
protegidos con geotextil, doblado en varias capas;
por encima de éste, el sondeo estratigráco se cu-
brió en su totalidad con el árido procedente de los
trabajos de excavación hasta colmatarlo.
Se mantuvieron in situ las varillas de hierro
corrugado que marcaban los vértices del sondeo
arqueológico para situar el lugar exacto de su ejecu-
ción. Igualmente, estos puntos fueron topograa-
dos y georreferenciados en una planimetría catas-
tral digitalizada en formato _CAD.
El proceso de excavación arqueológica del son-
deo estratigráco fue desarrollado en su mayor
expresión, orientado en todo momento hacia una
arqueología de una escala micro, a partir de un tra-
bajo detallado y minucioso (Molina, 2021). El ob-
jetivo primordial fue la enseñanza y el aprendiza-
je de los alumnos/as, tal y como se ha comentado
con anterioridad. Es por ello, que se determinó una
metodología exhaustiva y detallista, para que cen-
traran su atención a lo largo de todo el proceso de
aprendizaje, tanto en el teórico como en el práctico.
De esta manera, se incorporaron a la documenta-
ción detalles de gran importancia, totalmente in-
éditos hasta la fecha, que fueron posibles gracias a
un trabajo metódico y minucioso.
A continuación, se describe la relación de Uni-
dades Estratigrácas documentadas durante el pro-
ceso de excavación arqueológica del sondeo:
UE 01: Nivel vegetal en el que abundan especies
como aliagas, romeros, ajedreas, tomillos,
té de roca y manzanilla, entre otras plan-
tas herbáceas, arbustivas y espinosas típi-
cas de La Alcarria.
UE 02: Estrato de tierra de color marrón oscu-
ro, de textura arcillosa, poco compacto,
permeable y con escaso material arqueo-
lógico a excepción de algún fragmento
cerámico y material latericio. Tiene una
potencia que oscila entre los 15 y 20 cm.
UE 03: Estrato de tierra de color marrón claro, de
textura arenosa, poco compacto, permea-
ble y muy rico en restos de cal y arena.
En cuanto a los materiales exhumados,
destacan fragmentos de imbrices (teja
curva), además de algunos fragmentos de
yesones con pintura mural de color cala-
baza, rojo, verde y negro (estucos). Tiene
una potencia que oscila entre los 15 y 20
cm (gura 5).
UE 04: Derrumbe de una pared o muro de una
estructura habitacional de la villa. Se
documentaron varios sillares de roca de
toba, bien tallados y careados, de media-
no tamaño, derrumbados sin ningún tipo
de orden o dando lugar a algún tipo de
forma concreta. En cuanto a los materia-
les arqueológicos, se exhumaron algunos
fragmentos de yesones con pintura mu-
ral de color calabaza, rojo, verde y negro
(estucos). Tiene una potencia que oscila
entre los 20 y 25 cm, registrándose en la
mitad O del sondeo.
UE 05: Derrumbe de tejas curvas (imbrices) en
el que no se documentaron tejas planas
(tegulae). Tiene una potencia que oscila
entre los 10 y 15 cm y se extiende por toda
la supercie del sondeo (gura 6).
UEM 06: Cimentación de muro documentado en
la esquina SE del sondeo. Esrealizado
en mampostería, con piedra caliza de me-
diano y pequeño tamaño, y trabado con
argamasa de cal y arena de color blanque-
cino.
Figura 5. Vista oblicua de la UE 03 (colapso de las es-
tructuras).
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UE 07: Restos de pavimento de opus caementi-
cium documentado de forma dispersa en
toda la supercie de la UEM 09. Tiene
unos 15 cm de grosor, estando en la gran
mayoría de los casos disgregado en forma
de ripio de piedra, cal y arena.
UE 08: Estrato de tierra de color marrón claro,
de textura arenosa, poco compacto, per-
meable, en el que abunda la cal, la arena y
el ripio (piedra caliza machacada y algún
resto de teja muy fragmentada).
UEM 09: Pavimento de opus signinum en perfec-
to estado de conservación, documentado
en toda la extensión de la excavación ar-
queológica (gura 7).
UEM 10: Cimentación de muro documentado en
la esquina NO del sondeo. Esrealizado
en mampostería, con piedra caliza de me-
diano y pequeño tamaño, y trabado con
argamasa de cal y arena de color blanque-
cino.
UE 11: Zanja de saqueo, probablemente realizada
para extraer piedra de la UEM 10 y ser
reutilizada en otro lugar.
La secuencia estratigráca, completamente in-
tacta desde la colmatación de las estructuras en
época antigua hasta la apertura del sondeo arqueo-
lógico en la actualidad, y la casi ausencia de restos
arqueológicos de tipo mueble en el proceso de exca-
vación arqueológica, revela el progresivo derrumbe
de la construcción hasta su colapso total (guras 8 y
9). Solamente fue exhumado un fragmento cerámi-
co de terra sigillata encuadrado cronológicamen-
te en el siglo III d. C. Los datos obtenidos parecen
apuntar a un abandono premeditado y organizado,
al menos, en esta zona de actuación. En lo que res-
pecta a las causas de este hecho, se desconocen por
completo, y, probablemente, sea muy difícil averi-
guar sus motivos.
Debido al mencionado abandono, es posible, por
tanto, que la estructura de madera que soportaba
la propia cubierta sufriera algún tipo de deterioro
perjudicial. Esta circunstancia hizo que la estructu-
ra fuera debilitándose progresivamente y llegara un
momento en que no soportara el peso de las tejas.
Este proceso queda constatado arqueológicamen-
te por el hallazgo de un imbrex sobre la UEM 09,
dato que habla de ese progresivo desmoronamien-
to de la cubierta. Los daños estructurales fueron
tan graves que, en un momento determinado del
tiempo, la cubierta colapsó completamente y ca
sobre la UE 07, llevándosela consigo y cayendo so-
Figura 6. Detalle de la UE 05 (derrumbe de tejas curvas
procedente de la cubierta). Figura 7. Vista oblicua del sondeo una vez nalizados los
trabajos de excavación.
Figuras 8 y 9. Croquis de los Perles N y O del sondeo
estratigráco, respectivamente.
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bre la UEM 09. Puesto que fue documentado un
pavimento de opus caementicium (UE 07) so-
bre un pavimento de opus signinum (UEM 09),
es posible que la UE 07 correspondiese al techo y
la UEM 09 al suelo de la estancia. Posteriormen-
te, las paredes de la estructura fueron debilitándose
y desmoronándose progresivamente por acción de
los agentes atmosféricos, cayendo sobre el manto
de imbrices (UE 05). Finalmente, las consecutivas
UE´s 03, 02 y 01 hablan de niveles de abandono en
el tiempo desde época antigua hasta la actualidad.
No obstante, en todo momento hay que tener
en cuenta que el área de intervención arqueológica
realizada por el Programa Operativo de Empleo Ju-
venil de Castilla-La Mancha fue una mínima parte
en relación al área total del yacimiento arqueológi-
co. Por tanto, no se pueden extrapolar estos datos
e interpretaciones a todo el ámbito arqueológico.
Se debe tener en cuenta que es un razonamiento
parcial y puntual, centrado en un pequeño sondeo
estratigráco.
5.3. Valoración del estado de conservación
A partir de la inspección visual del yacimiento
en el transcurso de los últimos años, de lo que se
ha estudiado a partir de las imágenes de los vuelos
históricos, y de los diversos informes arqueológi-
cos realizados desde las intervenciones de Nonell
(1976), se aprecia un deterioro generalizado causa-
do por los agentes ambientales y el crecimiento de
la vegetación arbustiva y espinosa característica de
esta zona de La Alcarria. Llama la atención el cre-
cimiento de algunos arbustos relevantes junto a las
estructuras, como alguna encina y espino, además
del progresivo avance de la tierra de aluvión por el
perl O de la excavación. Al tratarse de una zona
en cuesta, con las lluvias las tierras arcillosas cada
vez sepultan más esa zona. A esto hay que añadir
la acción del arado, ya que el lugar se ha estado ro-
turando en todo su perímetro hasta el otoño del
año 2017, fecha en la que el Excmo. Ayuntamiento
de Cifuentes, a través del Programa Operativo de
Empleo Juvenil de Castilla-La Mancha (Alcón et
alii, 2018), delimitó el perímetro de la parcela 37
del polígono 506 mediante una valla metálica de
tipo cinegético.
Al tratarse de una zona con un clima muy ex-
tremo, los fenómenos de gelifracción han ido rom-
piendo muchas estructuras desde la primera exca-
vación arqueológica. Afortunadamente, no es un
yacimiento en el que se embalse en demasía el agua,
ya que está construido en diferentes alturas. No
obstante, se han producido dos grandes barranque-
ras en medio del corredor N y la gran estancia. Esta
zona se está erosionando progresivamente y, en un
tiempo determinado, hará peligrar la cimentación
de las estructuras.
Hay que destacar también el expolio de mate-
rial constructivo, sobre todo en los últimos años.
Dado el aspecto de abandono que tiene, muchos de
los lugareños han empleado los restos arqueológicos
como si de una cantera se tratase. Prueba de ello son
algunos testimonios de los vecinos de las localidades
y pedanías cercanas a Gárgoles de Arriba, que han
visto cómo poco a poco desaparecían los restos. Ob-
servando las fotografías de las excavaciones de las
décadas de los años ´70 y ´80 del siglo XX, se per-
cibe cómo se han perdido estructuras. Por ejemplo,
no quedan restos estructurales de los suspensurae
latericia de la zona termal; incluso, en algunos
muros se ve claramente la extracción premeditada
de sus piedras.
5.4. Instalación de cartelería
Una vez nalizados los trabajos anteriormente
descritos, se procedió a la instalación de un panel
informativo, haciendo uso de la imagen y del tex-
to, teniendo en consideración la información más
relevante, con el objetivo de construir una idea de
lo que era el yacimiento arqueológico en su entor-
no paisajístico. En él se describieron brevemente las
diferentes actuaciones arqueológicas llevadas a cabo
en la villa a lo largo del siglo XX, junto con un
croquis y varias fotografías recientes de los trabajos
arqueológicos. La cartelería fue situada en un punto
estratégico del yacimiento, concretamente junto a
la puerta de acceso del vallado de la parcela. De esta
manera, el visitante puede visualizar el entorno cir-
cundante de la villa romana, al mismo tiempo que
lee una información interesante y comparando los
planos y fotografías (guras 10 y 11).
Se trata de un panel tipo mesa-atril, realizado en
hierro con un tubo de 50 x 30 mm, que presentan
un tamaño global de 54 x 69 x 70 cm, lacado en
negro y con una gráca plasticada y sellada con
metacrilato. El panel fue inserto sobre un cajeado
realizado en el terreno y rellenado con hormigón
de cemento Portland.
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6. conclusIones
La circunstancia de que este proyecto estuviera
enmarcado en el tramo autonómico del Programa
Operativo de Empleo Juvenil de Castilla-La Man-
cha con una duración de 18 meses, destinado a la
preservación y rehabilitación de varios Bienes del
Patrimonio Cultural, generó un gran número de lí-
neas de investigación y de trabajo a largo plazo que
pudieron completarse con éxito. No hay que olvi-
dar que el proyecto tenía como objetivo primordial
hacer partícipes a los jóvenes, con una franja de
edad entre los 17 y 29 años, en un proceso de I + D
+ i sobre el Patrimonio Cultural de la localidad de
Cifuentes (Guadalajara).
Este proyecto propició un trabajo cientíco y
de investigación minucioso, en el que los resulta-
dos fueron exclusivos; no sólo desde el punto de
vista de la intervención arqueológica, sino desde la
perspectiva del alumnado. Contar con 18 meses de
tiempo y con un presupuesto holgado fue de suma
importancia para desarrollar varias líneas de trabajo
y de investigación en las que profundizar con tran-
quilidad y sin ningún tipo de presión. El alumnado
fue aprendiendo poco a poco, con el paso de los días
y de los meses, alternando las clases teóricas con
las prácticas. En los meses nales del proyecto, el
alumnado consiguió tener un notable conocimien-
to de la cultura y de la historia de la localidad de
Cifuentes (Guadalajara) y de su entorno más inme-
diato; un entendimiento en cuanto a metodología
arqueológica, de restauración y de albañilería; ade-
más de crear entidad de equipo, en el que cada uno
sabía cuál era su posición y objetivos de trabajo.
En la villa romana de Gárgoles de Arriba no sólo
se desarrollaron trabajos de acondicionamiento,
sino que, además, se analizó el estado de conserva-
ción de los restos arqueológicos; asimismo, se llevó a
cabo una importante valoración arqueológica a par-
tir de un sondeo estratigráco. Éste ofreció una se-
cuencia estratigráca totalmente íntegra y novedo-
sa, desde la colmatación de las estructuras en época
antigua hasta la apertura del sondeo arqueológico
en la actualidad. A partir de esta intervención, se
ha documentado la primera secuencia estratigrá-
ca desde que existen registros arqueológicos en este
yacimiento. Ésta reveló el progresivo derrumbe de
las estructuras hasta su colapso total, certicando el
abandono premeditado y organizado, al menos, de
esta zona en concreto.
En lo que respecta al estado de conservación de
los restos arqueológicos documentados a lo largo
del siglo XX, es fundamental que se realicen labores
de mantenimiento y/o conservaciones periódicas.
El objetivo de este cuidado es impedir el avance
del deterioro de las estructuras arqueológicas, ade-
más del continuo expolio que sufre la zona. Es pri-
mordial que de forma habitual se realicen labores
de limpieza supercial y desbroce de la vegetación
arbustiva y espinosa de la zona, evitando que las
raíces alteren las estructuras.
7. agradecImIentos
A lo largo de año y medio cooperaron en el pro-
yecto un gran número de personas, tanto de forma
directa como indirecta, así como empresas, organis-
mos ociales y entidades, que hicieron posible este
trabajo. Enumerar a todos ellos sería prácticamen-
te imposible, ocupando un buen número de líneas;
sin embargo, no puedo olvidar a los integrantes del
proyecto que trabajaron bajo la Dirección Arqueo-
Figura 10. Detalle del panel tipo mesa-atril situado en la
puerta de acceso del vallado de la parcela.
Figura 11. Detalle del cartel informativo de la villa roma-
na de Gárgoles de Arriba (Cifuentes).
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lógica del que suscribe estas palabras: los Técnicos
Arqueólogos Loreto Parro González y Juan Carlos
Batanero Nieto, la Técnico Restauradora Agustina
Velasco Rodríguez, el Ocial de Albañilería José Is-
rael Gilolmo Grande y los/as alumnos/as Jonathan
Fernández Aguilella, Luis Galán Valera, Ana Tere-
sa García Montilla, Yvonne Moreno Pérez, Cristian
Recuero Cuadrado, Óscar Sanz Moreno, Cristian Si-
món Blas, José Antonio Tineo Blas y Jorge Daniel
Torres Mera. Gracias a todos ellos por su esfuerzo
y tesón, por su entrega y compromiso, por hacer
posible este proyecto.
8. fInancIacIón de la InvestIgacIón
Esta investigación no ha contado con nancia-
ción.
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